Un año en el que pasó de todo: me desilusione , llore, desconfié de todo el mundo, nada lo veía con claridad, las cosas que quería lograr me constaron mucho...pero después de un día para el otro todo se acomodó: reí, fui feliz, hice locuras, me sorprendí, volví a confiar aunque muy de a poco y me puedo alegrar de las cosas buenas que logra, porque si bien todo me costó y mucho, lo importante es haber logrado cumplir mis objetivos.
Aprendí que hay mucha gente hipócrita y falsa dando vueltas, gente con doble cara que ya no cambia por más que lo intente, y que no hay que perder el tiempo con ellas, sino más bien alejarlas y olvidarlas porque no se merecen nada de nosotros. Y a dejarles que la vida les devuelva lo que nos toca y dejar de preocuparnos por ellas. Esa gente salió de mi vida y espero que no vuelva jamás.
Descubrí la amistad verdadera de aquellas personas que están siempre y que saben encontrar la palabra indicada en el momento ideal, que te acompañan y te ayudan a ver las cosas con claridad y de buena manera.
Comprobé una vez más que la vida te sorprende cuando menos te lo esperas, que las cosas que uno quiere suceden cuando menos uno las espera, pero pasan...cuando deseas algo es probable que suceda. Alguien nuevo apareció en mi vida, que nose cuanto duré pero sé que alguna enseñanza buena viene a dejarme.
La amistad, el cariño, el amor son cosas que dan felicidad y alegría..con esas cosas me quiero quedar y con las personas que me supieron dar eso son las que quiero tener al lado mio.Las demás se pueden seguir perdiendo en la lejanía del camino para no volver más.
No creo en las casualidades...es algo que confirme este año. Todo sucede por algo, cada cosa tiene su propósito pero hay que tener mucha paciencia y los ojos bien abiertos para descubrirlo. Siempre es para mejor asi que no hay que bajar los brazos, porque lo bueno puede venir a la hora menos esperada y de la mano de aquella persona totalmente impensada...a estar atentos que la vida nos sorprende
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